Origen de la escritura

Aunque la ciencia sitúa la aparición de la escritura hace solo unos 5000 años, los humanos llevan al menos 45.000 años intentando comunicarse utilizando signos gráficos, como las pinturas rupestres, que representaban principalmente personas, animales, objetos y escenas de caza. Es el caso del jabalí encontrado en la cueva de Leang Tedongnge, en la isla indonesia de Célebes, que se considera la pintura rupestre más antigua encontrada hasta la fecha. El hallazgo de líneas rectas y curvas, puntos y huellas de manos al lado de algunas de esas pinturas hacen suponer que la intención de estas obras era transmitir mensajes, probablemente relativos al paso del tiempo o la presencia y cantidad de piezas de caza en un lugar determinado.

El deseo de comunicar conceptos cada vez más complejos y abstractos, así como el desarrollo del comercio, que provocó la necesidad de llevar un registro exhaustivo de las mercancías compradas o vendidas, suscitó la aparición de un sistema de signos gráficos que es lo que actualmente conocemos como escritura.

Standard reconstruction of writing development. Source: https://www.thearchaeologist.org.

La mayoría de los investigadores coinciden en que la escritura apareció en Mesopotamia, en una región situada entre los ríos Tigris y Éufrates. Los habitantes de esta región idearon entre los años 5000 y 4000 a.C. un sistema de rodillos cilíndricos que se hacían rodar para grabar en tablillas de barro una serie de signos que identificaban al propietario de la mercancía, así como el producto y la cantidad.

Este sistema evolucionó y entre 3400 y 3200 a.C. aparece la escritura cuneiforme, un sistema de escritura logográfico (en el que cada signo representaba un concepto), y silábico (pues incluía algunos símbolos que representaban sílabas, lo que permitía componer distintas palabras). La escritura cuneiforme se utilizó para expresarse en varias lenguas, principalmente sumerio, hitita y acadio, y se denominaba así porque las inscripciones tenían forma de cuña.

De manera paralela, hacia el año 3300 a.C. aparece la escritura jeroglífica en Egipto, que mezclaba logogramas y signos que representaban sonidos consonantes (simples o combinando hasta 4 sonidos), lo que se denomina sistema abyad o alifato.

No fue hasta dos milenios más tarde, hacia 1200 a.C. cuando aparece la escritura china, el único sistema logográfico que ha llegado hasta la época actual.

Aunque en sus inicios estos tres tipos de escritura utilizaban pictogramas (representaciones de los objetos reales) para transmitir los conceptos, la dificultad para grabar en materiales como madera o piedra condujo a una simplificación y estilización de los símbolos, que se fueron haciendo más arbitrarios y menos icónicos, lo que facilitaba la escritura y de manera simultánea restringía la lectura a los escribas, pertenecientes normalmente a las clases privilegiadas.

From pictograms to abstract forms, in Mesopotamian cuneiforms, Egyptian hieroglyphs and Chinese characters. Source: https://www.thearchaeologist.org.

Hacia el año 1500 a.C., en la zona del monte Sinaí aparecen los primeros sistemas alfabéticos, en los que cada signo representa un único sonido. Estos símbolos representaban únicamente sonidos consonánticos y fueron tomados de los sistemas ya existentes, es decir, el cuneiforme y el jeroglífico, aunque también se inventaron nuevos signos a partir de pictogramas de palabras que comenzaban por ese sonido (ej: la “m” de la palabra “mem”, que significa “olas”). Los fenicios modificaron ligeramente las letras e introdujeron algunas vocales a partir de consonantes ya existentes (ej: la “i” de la “j”, la “u” de la “w”), los griegos estilizaron aún más la forma las letras y añadieron el resto de las vocales y los romanos realizaron pequeñas modificaciones al alfabeto griego hasta darles a las letras la forma que hoy conocemos (Dehaene, 2009).

Evolution of the current alphabetic system from the Proto-Sinaitic to the modern Latin alphabet. Source: Matt Baker.

Aunque el sistema ortográfico más utilizado en la actualidad es el alfabético (especialmente el latino), todavía existen distintos sistemas ortográficos en el mundo derivados de algunos de esos primeros sistemas de escritura.